Reconstrucción total de una preexistencia, un antiguo granero de muros de piedra. Los libros serán los nuevos habitantes.
Elementos vernáculos convertidos en contemporáneos.
Los muros de mampostería N, S y E se mantienen. Los huecos se abren a la plaza de la antigua cantina.
El proyecto genera dos plazas conectadas, creando nuevos recorridos. Un nuevo lugar de encuentro, de sombra (en verano), de sol (en invierno), lugar de juegos. Se plantarán encinas y romero en las plazas.
Todo ello para la actividad cultural para Quintana: espacio polivalente, revitalización del pueblo, presentación de libros. Convirtiendo a Quintana en referencia de la trufa negra y del libro.